Acotar que tipo de democracia queremos es algo muy
interesante.
Nosotros queremos una democracia transversal en consiste
eso:
El capitalismo va de la mano de la democracia liberal, este
sistema imperante a fracasado la clase trabajadora y clase media está más
tocada que nunca las diferencias sociales son cada vez más grandes los pobres
cada son más y más pobres y los ricos cada vez menos y más ricos. Tratar de
reflotar este sistema es un error a toda costa.
Bajo la premisa que si nadie trabaja por ti que nadie decida
por ti. Creemos que en democracia la participación directa en las grandes
decisiones las tome el ciudadano y en no delegar esas decisiones en los
partidos políticos Nos llevó Aznar a la guerra, en contra a la oposición de la
ciudadanía. Nos llevaron a la OTAN, nos metieron la constitución con calzador
cuando en muchos lugares se votó mayoritariamente en contra. Nos metieron en el
EURO sin la opinión de la ciudadanía etc.
Pero creo que la democracia tiene que estar acotada,
para que no se cometa burradas, para que no sea un monopolio
de banqueros y especuladores frente a la ciudadanía para que haya armonía y una
guerra entre los de arriba y los de abajo tiene que basarse en unos valores,
valores universales, valores cristianos, donde se apueste por la vida, y una vida en condiciones, para que la economía este a favor del
ciudadano y no al revés, así una democracia donde se
proteja a la familia y los trabajadores y las PYMES, para impedir los teje manejes de la banca y delos políticos.
Optamos por una democracia efectiva y con justicia integral
Se invoca en las propagandas rojas la democracia, la libertad del pueblo, la fraternidad humana, tachando a la España nacional de enemiga de tales principios. A esta democracia verbalista y formal del Estado liberal, en todas partes fracasada, con sus ficciones de partido, leyes electorales y votaciones, plenos de fórmulas y convencionalismos, que confundiendo los medios con el fin, olvida la verdadera sustancia democrática, nosotros abandonando aquella preocupación doctrinaria, oponemos una democracia efectiva, llevando al pueblo lo que le interesa de verdad: verse y sentirse gobernado, en una aspiración de justicia integral, tanto en orden a los factores morales cuanto a los económicos-sociales; libertad moral al servicio de un credo patriótico y de un ideal eterno y libertad económica sin la cual la libertad política resulta una burla.
Por una Verdadera democracia
El nuevo Estado español será una verdadera democracia en la cual todos los ciudadanos participarán en el Gobierno por medio de su actividad profesional y de su función especifica.
El nuevo Estado español será una verdadera democracia en la cual todos los ciudadanos participarán en el Gobierno por medio de su actividad profesional y de su función especifica.
Por una democracia que ame la libertad
Los españoles amamos la libertad como el pueblo que más pueda estimarla; pero una libertad compatible con el orden, con el progreso social de los españoles, el engrandecimiento de la Patria y el destino eterno de nuestra especie.
Los españoles amamos la libertad como el pueblo que más pueda estimarla; pero una libertad compatible con el orden, con el progreso social de los españoles, el engrandecimiento de la Patria y el destino eterno de nuestra especie.
Por una democracia con personalidad humana y orgánica.
Para nosotros tiene más importancia lo que acentúa el valor de la personalidad humana, la plena valoración del individuo, que la democracia formalista y gárrula que lo explota. A esa democracia convencional nosotros oponemos una democracia cristiana y orgánica que dignifica y eleva al hombre, garantizándole sus derechos individuales y colectivos, que no admite su explotación por medio del cacicazgo y de los partidos políticos profesionales, sino que les abre cauce libre a través de las Hermandades, Sindicatos, Corporaciones u organismos provinciales y locales, en los que discurre su vida y en los que tiene pleno conocimiento.
Una democracia al servicio al pueblo
Nosotros vamos a buscar la democracia en el servicio del propio pueblo; buscando el hombre a través de los medios en que vive y se desenvuelve: en el Sindicato, en su trabajo, en la Hermandad, que no admite que sean organismos muertos; queremos que sean organismos vivos, que allí llevéis vuestras ideas y que podáis sostener el diálogo con el Estado, y que el verdadero sentir de la nación se plasme en obras en beneficio de todos, como llevamos realizando estos años.
Una democracia que busque las verdaderas necesidades de los pueblos