Que quede bien claro para que no me confundan con otros que llevan toda la mañana haciendo genuflexiones a Donald Trump: este señor nada tiene que ver conmigo, vamos, que “no es de los míos”.
¿Que quiere llevarse bien con los rusos? ¿Qué quiere terminar con el ISIS? ¿Que quiere dejar en paz a Bashar al-Ásad y a Irán? Perfecto, me parecerá muy loable si lo consigue. Pero este señor es un liberal, un ultra liberal, y eso, le convierte en mi enemigo.
Ahora bien, que nadie me ponga de parte de todos esos papanatas que llevan toda la mañana con las manos a la cabeza lloriqueando, su candidata Hillary Clinton no es ningún ejemplo de nada, todo lo contrario, es la que alimenta guerras, pobreza, explotación... eso sí, con la falsa sonrisa de alguien enfermo de poder y egoismo...
Veremos que hará la industria armamentista yankee y sus lobbys... y los amigos de AIPAC.
